Desde el área de psicología en atención temprana, damos cobertura a aquellos trastornos o comportamientos que puedan aparecer en el niño como consecuencia de su situación social, emocional, educativa y/o personal, complementando el trabajo del resto de profesionales, si fuera el caso. La psicoterapia puede resultar un gran apoyo para desarrollar y afianzar las capacidades y habilidades del niño desde la comprensión de su globalidad y de las características propias de la etapa de desarrollo en la que se encuentra.
Cuando el menor se encuentre escolarizado se establecerán vías de comunicación con el centro al que acude con el fin de establecer pautas comunes que faciliten la interacción y las relaciones
Acompañando al menor y a su familia
En la intervención psicológica cobra especial relevancia conocer y entender el contexto familiar y social del menor para apoyar y fortalecer el vínculo entre éste y sus padres así como entre los propios padres y hermanos si los hubiera. Ofrecer recursos y herramientas que mejoren las relaciones personales y familiares será uno de los objetivos de la intervención psicológica en particular y del programa de Atención temprana en general.